Frederick Hiam se ha convertido en la primera empresa del mundo en instalar una línea de corte óptico de chirivía totalmente automatizada. Descubra cómo esta audaz decisión les ha ayudado a duplicar el rendimiento, reducir la mano de obra en más de un 90% y preparar su negocio para el futuro con una tecnología pionera en el sector.

"Adaptarse o morir

Cuando Frederick Hiam Ltd. se enfrentó a una grave escasez de mano de obra en vísperas de las Navidades de 2021, el director general Jamie Lockhart se plantó en la fábrica y se planteó una dura pregunta: "¿Vamos a adaptarnos o nos detenemos?". La respuesta, y la audaz decisión que siguió, no solo han transformado su negocio, sino que han establecido un nuevo punto de referencia para el procesamiento de verduras a nivel mundial.

En colaboración con Wyma Solutions, Frederick Hiam se ha convertido en la primera empresa del mundo en implantar una línea de recorte óptico totalmente automatizada para chirivías. Este logro ha duplicado el rendimiento, ha reducido significativamente la dependencia de la mano de obra y ha abierto nuevas oportunidades comerciales.

Una visión que empezó con un vídeo

El viaje comenzó cuando Jamie vio un video de un prototipo temprano del Optical Roto-Cut de Wyma. "Inmediatamente supimos que podría cambiar las reglas del juego", recuerda. "No había nada parecido en el mercado, y la chirivía es un cultivo muy especializado".

En lugar de esperar al lanzamiento comercial, Frederick Hiam tomó la audaz decisión de instalar el prototipo directamente en su fábrica en funcionamiento. El objetivo era acelerar el aprendizaje automático y adaptar el sistema a las complejidades únicas de las chirivías, desde las formas irregulares hasta las variaciones de la corona.

"Trabajamos en estrecha colaboración con Wyma para ayudar a la máquina a aprender. Esa colaboración fue clave", afirma Jamie. "La recortadora que tenemos hoy está muy por delante de donde empezamos, pero los principios son los mismos".

De 20 personas a sólo 2

Uno de los retos que impulsaron la inversión fue la mano de obra. "Cada vez es más difícil encontrar personas dispuestas a estar todo el día en las líneas de hortalizas", explica Jamie. "Teníamos 20 personas alimentando las antiguas líneas de recorte manual. Ahora tenemos dos, y creemos que podemos reducirlas a una".

Al automatizar una de las fases más laboriosas del procesado de la chirivía, Frederick Hiam no sólo ha reducido el número de empleados. Ha mitigado uno de los mayores riesgos operativos a los que se enfrentan los procesadores de productos frescos del Reino Unido y Europa.

95% de precisión. 25% de ahorro energético. El doble de rendimiento.

Los beneficios hablan por sí solos:

• La precisión del recorte ha pasado del 65-70% con los sistemas manuales al 95% con las nuevas cortadoras, lo que es fundamental para obtener envases listos para la venta.

• El rendimiento se ha duplicado, lo que permite a la empresa procesar más volumen en menos tiempo.

• La mano de obra en la línea de recorte se ha reducido en más de un 90%, de 20 a 2 personas.

• El consumo de energía y agua se ha reducido hasta en un 30%, gracias a sistemas más inteligentes y al reciclado del agua en el marco de la modernización de la línea.

• Ahora es posible colaborar con otros productores, y Frederick Hiam recorta chirivías para otros envasadores, lo que aumenta aún más el volumen y la eficacia de la línea.

  
  

Creada para obtener resultados reales

Desde el principio, el equipo de Wyma trabajó en estrecha colaboración con los ingenieros de Frederick Hiam para diseñar un sistema que se integrara perfectamente en su espacio actual. "No se trata sólo de maquinaria. Se trata de trabajar con limitaciones reales", afirma Jamie. "La voluntad de Wyma de resolver problemas y adaptarse fue lo que hizo que funcionara".

Más allá del rendimiento de la maquinaria, Jamie también da crédito a la experiencia de codesarrollo. "No nos limitamos a comprar una solución. Ayudamos a darle forma. Esa colaboración ha sido inestimable".

Una ventaja competitiva que ha llegado para quedarse

Aunque la inversión fue importante, la recompensa ha sido mayor. Con la nueva línea instalada, Frederick Hiam puede garantizar un suministro de gran volumen y alta calidad durante los periodos de mayor actividad, incluidas las Navidades, lo que les da confianza y una sólida posición en el mercado.

Además, la nueva línea ha permitido una mayor colaboración en el sector. "Ahora trabajamos con otros productores, compartimos tecnología e incluso gestionamos sus cadenas de suministro", explica Jamie. "Es algo que antes no podíamos hacer".

Mirando al futuro

Frederick Hiam está planificando la fase 3, que podría incluir la clasificación óptica de la calidad. Para Jamie y su equipo, se trata de algo más que de innovación. Se trata de supervivencia, sostenibilidad y ventaja competitiva.

"Hay momentos en la empresa en los que sabes que vas por el buen camino", reflexiona Jamie. "Este fue uno de ellos. Estamos orgullosos de lo que hemos conseguido y entusiasmados con lo que viene".

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